En una hermosa jornada en la residencia británica en Buenos Aires, la Fundación Romeo junto con el embajador británico Sir Mark Kent entregaron el Premio Shakespeare 2018 a Lía Jelín.

 

Lía es sinónimo de dedicación, pasión por el teatro, compromiso con sus colegas y dirigidos y respeto al público. Con su buen humor, generosidad y talento ilumina a las jóvenes generaciones de artistas que ven en ella un ejemplo a seguir.

 

Lía Jelín

actriz, bailarina, coreógrafa y directora de teatro

estudió danza en Israel, en la escuela de Martha Graham, composición coreográfica con Josef Tal, danza moderna con Renate Schottelius y actuación con Beatriz Matar, Antonio Mónaco y Augusto Fernández. Como actriz fue coprotagonista de Tato Bores en su programa humorístico y con Iris Marga y Marilú Marini en Familia de artistas, en el Teatro Maipo, entre otras actuaciones.

Tuvo a su cargo la puesta en escena de Viet-rock, de Megan Terry y de Juan Moreira Supershow, de Pedro Orgambide y Jorge Schussheim. En 1973 dirigió la recordada El gran soñador con Hector Malamud y Leonor Galindo sobre Charles Chaplin, con música de Mario Litwin. También coreografió ―entre otras― Las mil y una Nachas, el espectáculo de Nacha Guevara y Claudio Segovia (1973-1975).

Dirigió numerosas obras de teatro, entre las que pueden mencionarse Toc-toc y El rey se muere (adaptadas por su esposo, Jorge Schussheim),​ Confesiones de mujeres de 30, Los caballeros, Maní con chocolate, Adolece que no es poco, Monólogos de la vagina, Áryentains y El día que Nietzsche lloró, entre otras.

Destacamos la dirección de “Shakespeare reducido” una obra que colabora con el objetivo de nuestra fundación de desacralizar a Shakespeare, acercárlo al público, quitarle la etiqueta de que es para una elite y de que no es fácil de comprender.