Patricio Orozco BEM

Director

Corremos el telón del 2021 para celebrar el décimo aniversario del Festival Shakespeare Buenos Aires, un festival único en Latinoamérica.

Dirigir y producir año tras año este festival a lo largo de una década ha sido una experiencia enriquecedora y desafiante. Los vaivenes económicos de nuestro país y sus cambios en las diferentes políticas culturales nos han hecho navegar por aguas calmas y también atravesar tempestades. Nacimos como un festival independiente realizado en un pequeño teatro del Abasto para más tarde ser elegidos por el Ministerio de Cultura como un festival oficial de la Ciudad de Buenos Aires. Un honor. Al cabo de unos años y de algunos cambios de polémicos ministros de cultura, nunca más pudimos contar con su apoyo. ¿Ser o no ser? Fue una pregunta que nos hicimos seguido. Esperamos en el futuro encontrarnos con funcionarios sensibles, que valoren nuestra propuesta.

Seguimos adelante con alegría y entusiasmo, sabiendo que contamos con el reconocimiento del público, de nuestros auspiciantes, de artistas y personalidades de Argentina y del exterior. Al fin de cuentas, como diría Lisandro en Sueño de una noche de verano: “The course of true love never did run smooth.”

Llevamos al festival a museos, catedrales, fábricas abandonadas, parques públicos, casas históricas, palacios, carpas de circo, comunidades vulnerables, centros culturales, cines y canchas de fútbol. Construimos un teatro isabelino con andamios por el que pasaron más de 100.000 espectadores. Como en el Londres del 1600, Shakespeare, se transformó en una fiesta popular.

Como proyecto educativo creamos en 2015 el Festival Shakespeare en la Escuela. Desde entonces, todos los años participan más de 250 escuelas de todo el país involucrando a alumnos de primaria y secundaria en actividades como teatro, poesía, música, plástica y cortometrajes. Los niños y adolescentes también tienen una cita anual con el poeta que describió el alma humana como nadie.

Pero si tuviera que destacar un momento que sintetice cómo hemos trabajado estos años, señalaría cuando en una misma semana de abril de 2014, estuve presentando el festival en París, invitado por la Sorbonne Université y dos días después me encontraba desarrollando actividades para los chicos en Ciudad Oculta. Ha sido una constante entablar nuevos vínculos, buscar cooperación y establecer puentes entre quienes tienen abundancia de recursos y quienes sufren múltiples carencias. Hemos abierto las puertas a nuevas generaciones de dramaturgos, actores y directores que han vivido su primera experiencia  con estos fantásticos textos. Shakespeare ya no es la propiedad privada de una elite.

En febrero de 2011 comenzó esta aventura con el objetivo de homenajear al más grande escritor de todos los tiempos, acercarlo a nuevos espectadores, hacerlo más popular y transformar a la Ciudad Buenos Aires en el centro de la actividad shakespeareana de la región. Creo que lo estamos logrando.

No quiero dejar de agradecer a todos los artistas, espectadores y proveedores que han hecho posible la producción de este festival para que ustedes disfruten de un evento único año tras año.

También reconocer especialmente a quienes han apoyado al festival en sus primeros diez años de vida: Norma Aleandro, Duilio Marzio, Jorge Marrale, Salo Pasik, Kive Staiff, Hernán Lombardi, Cristina Perez, Embajador británico John Freeman, Embajador británico Mark Kent, al equipo de trabajo de la Embajada Británica en Argentina, Essarp, Lino Patalano, Asoc. Cultural Inglesa, Académia Porteña del Lunfardo, Familia Contartese, Carlos Casellas, Jorge Dubatti, Eleonora Jaureguiberry y José Miguel Onaindia.

A todos, muchas gracias por su compromiso y confianza.

Espero que disfruten de esta décima edición 100% online. ¡Que no se lo pierdan, esa es la cuestión!

 

Patricio Orozco BEM

Director